¡Hola!
Como hiciera ya hace unos meses, hoy os muestro la otra clase donde estoy con mis duendes.
Como veis, soy una fan del ¨animal print¨ y la decoración de esta clase es temática (lo cual me permite tener un estilo fijo y no cambiar demasiado las cosas para las festividades, sólo cosas puntuales). He elegido este tipo de decoración porque es muy vistosa y a las/os niñas/os les suele parecer divertido eso de estar ¨como en una selva¨. Por otro lado, me permite hacer referencia a animales y atribuirle cualidades, como por ejemplo que las cebras pueden parecer idénticas pero son únicas (como lo son ellas/os), que al igual que los koalas, no importa al ritmo que hagan las cosas siempre y cuando se hagan bien y con un propósito claro... o que hay que mantenerse erguida/o y con calma, al igual que lo hacen las jirafas...
Justo entrando, tengo unas estanterías que adapté un poco para poder tener tanto los recursos como sus carpetas a mano y que ellas/os puedan ser independientes y colaborar en el orden y cuidado de la clase.
A continuación tengo el rincón de los líos...o lo que debería ser mi escritorio. También tengo al lado un trípode donde pongo la agenda visual que uso con mi alumnado más pequeño. Lo tengo cerca de las mesas de trabajo, para que puedan usarlo fácilmente.
Justo debajo tengo lo que ellas/os han denominado ¨la casita de las boquitas¨...¡y quién soy yo para cambiarle el nombre! jajaja También me gusta tenerlo a su alcance, para que puedan colaborar en el orden y cuidado de ellas, y trabajar la autonomía.
Hace un tiempo creé unos rótulos para tomar conciencia en las clases de palabras, ya que si bien es cierto que nos pasamos el día hablando con y de palabras, a veces cuesta distinguir cuáles son.
Así que no sólo nos viene bien bien para conocer los tipos de palabras, sino para cuando hacemos ejercicios de expresión oral como descripciones, narraciones...completar, añadir, cambiar las palabras según el tipo que necesitemos (con este recordatorio es más fácil que ellas/os lo hagan de forma más autónoma).
Algo que me gusta mucho de nuestro trabajo es lo versátil que es y que de un año para otro (con la llegada de nuevo alumnado) puedes trabajar otros aspectos que a lo mejor, otros años no lo hacías de manera tan específica y sistemática, lo que da lugar a nuevas rutinas y, al menos para mí, la creación de nuevos espacios dentro de la clase. Este año estamos dando mucha caña a las habilidades metafonológicas, así que tengo un espacio dedicado a esto; bueno a eso y a mil cosas más, que hay poco espacio y ¡hay que optimizarlo! jejeje
A continuación tengo el espacio de la pizarra; como es muy grande y no la usamos entera, reservé un espacio para usarlo de calendario; lo gestionan ellas/os y se encargan de que esté al día. La verdad es que están más pendientes que yo de que esté todo organizado...¡anda que se les va a olvidar una mañana!
Hace varios cursos creé estas autoinstrucciones para la realización de las tareas y la verdad es que me van tan bien, que las sigo usando:
Ya después, tengo una zona especial para el vocabulario y el espejo; aquí solemos hacer actividades de articulación, expresión oral, relajación...
Me gusta que sientan que en la clase hay algo para ellas/os, así que como tengo varios fans de la Guerra de las Galaxias, preparé esta frase del maestro Yoda. A mis chicos les gusta tener algo de Star Wars en clase y la frase nos encanta...¡hay que ir a por todas! :)
Es una prioridad que el aula sea un espacio donde se sientan cómodas/os y puedan recordar lo valiosas/os que son, así que hice varios rótulos dedicados a este aspecto:
Justo debajo, tengo una mesita con diferentes cosas para trabajar la expresión oral y la relajación, además de elementos para la higiene y el cuidado personal:
Justo en el centro, tengo las mesas de trabajo; las movemos en función del trabajo que vayamos a hacer y/o el grupo que toque,pero por lo general, me gusta esta disposición porque permite que se vean todas/os y que la colaboración sea más fácil:
Hace tiempo compré esta tarjeta de felicitación de Mr. Wonderful y la verdad es que la tenía en casa muerta de risa; así que decidí traerla a clase y hacer un pequeño recordatorio por si algún día se nos tuerce la cosa; coloreé la nube y le puse un recordatorio y cuando necesitamos un empujoncito en el ánimo, la destapamos:
Ya lo único que me queda es enseñaros la decoración de la puerta: por dentro tengo unas normas generales de aula y por fuera la decoré...cómo no, también con motivos de animal print .
Y a grandes rasgos, ¡esta es nuestra pequeña selva! Espero que esta entrada os haya resultado útil y os haya dado alguna idea.
Si os ha gustado algún rótulo y os gustaría tenerlo en vuestras clases, poneos en contacto conmigo y os lo enviaré.
¡Buen comienzo de semana!
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